Cómo lograr el éxito en la FIV: conozca todo lo que debe y no debe hacer

La FIV ha surgido como una bendición para las parejas que no consiguen concebir de forma natural. Esta técnica de reproducción artificial incluye la extracción de óvulos de los ovarios, la fecundación in vitro y la transferencia de embriones sanos al útero de la madre. Sin embargo, la FIV es tediosa y requiere muchos cuidados y precauciones. Para ayudarte a tener éxito en tu tratamiento, hemos mencionado algunas cosas que debes hacer y no hacer en la FIV.
Antes del ciclo
Cosas que hay que hacer
Saber qué esperar: La FIV es un reto en términos de aspectos físicos, emocionales y financieros. Por lo tanto, antes de dar el paso, hable con su médico sobre el proceso y las consecuencias del tratamiento de FIV. Esto le permitirá prepararse mentalmente para el inminente procedimiento. No olvide ser sincero con su médico sobre las enfermedades predominantes o pasadas de usted y su pareja. Esto les ayudará a determinar si la FIV sería segura para ustedes o no.
Alimente su cuerpo: Una dieta adecuada tiene un efecto profundo en la tasa de éxito del tratamiento de FIV. Por lo tanto, comience su dieta de FIV un par de meses antes de su ciclo de FIV. Esto le ayudará a preparar su cuerpo. Asegúrese de mantener un bajo nivel de carbohidratos en su dieta. Los componentes esenciales de una dieta para la FIV incluyen verduras, proteínas y grasas saludables.
La dieta mediterránea se considera ideal para este propósito, ya que satisface todas las necesidades de nutrientes de su cuerpo que son importantes para mantener la calidad de los óvulos y los espermatozoides, la producción de hormonas, la preparación del útero para la implantación del embrión de la FIV y el cuerpo para las primeras etapas del embarazo. Después de consultar con tu médico, empieza a tomar suplementos prenatales según sus consejos para preparar bien tu cuerpo para afrontar el enorme cambio.
Controla tu peso: Antes de que comience el ciclo de FIV, es muy importante mantener el IMC dentro de los límites normales. Salirse de los límites en cualquiera de los extremos puede resultar perjudicial para el éxito del procedimiento. Estar por debajo o con sobrepeso se ha asociado con una interferencia negativa en los procesos de ovulación y otros aspectos de la fertilidad, al tiempo que aumenta las posibilidades de aborto.
Por lo tanto, suscríbase a un ejercicio moderado todos los días para mantener un peso adecuado. Evita los ejercicios intensos que probablemente puedan suponer un exceso de tensión en tu región abdominal o interferir en tu ciclo menstrual.
Controla el estrés: El estrés ha sido a menudo el culpable del fracaso de los tratamientos de FIV. Sin embargo, el estrés provocado por la ansiedad de la infertilidad es comprensible. No obstante, es importante controlarlo. Es porque los altos niveles de estrés afectan al hipotálamo y a la hipófisis, que son responsables de la producción de hormonas que estimulan la formación de óvulos y esperma.
Además, la hormona del estrés, el cortisol, cuando está presente en niveles elevados, impide la afluencia de sangre al útero, necesaria para prepararlo para la implantación del embrión de la FIV. Por lo tanto, ya sea a través del yoga, la meditación o la acupuntura, siempre debes controlar el estrés.
Lo que no hay que hacer
Es obvio que hay que alejarse del consumo de alcohol y sustancias mientras se prepara el procedimiento vital. Sin embargo, nos gustaría reiterar esto para usted. Evite fumar, el alcohol, la cafeína y las bebidas gaseosas. Según los informes, reducen significativamente las posibilidades de concepción y aumentan la posibilidad de un aborto espontáneo. Así que, ¿por qué arriesgarse? Más bien, intenta realizar otras actividades recreativas para controlar el estrés y duerme lo suficiente para obtener un impulso de energía.
Durante el ciclo
Lo que hay que hacer
Mantenerse sana: Cuando empiece el ciclo de FIV, no tires tu dieta ni tu régimen de ejercicios a la basura. Debes seguir estando sana y mantener tu cuerpo preparado para hacer frente a los desafíos físicos. Consuma alimentos saludables, haga ejercicio a diario y mantenga el estrés bajo control.
Bebe suficiente agua: Se recomienda beber mucha agua. Eso ayuda a eliminar las toxinas de tu cuerpo. Además, ayuda a prevenir el síndrome de hiperestimulación ovárica, que hace que los ovarios se hinchen y duelan en respuesta a los medicamentos del tratamiento de FIV. Hay que beber al menos de dos a tres litros de agua para mantener una salud adecuada durante el tratamiento.
Lo que no se debe hacer
Ejercicios de alto impacto: Los ejercicios de alto impacto y cardiovasculares desvían la sangre de los ovarios a las extremidades. Esto dificulta la preparación del ovario para la concepción. Además, el tratamiento de FIV provoca el agrandamiento de los ovarios. Por lo tanto, existe el riesgo de que se produzca una torsión ovárica debido al ejercicio intenso que podría afectar negativamente al tratamiento de FIV. Para ponerte en marcha, limítate a hacer yoga, caminar y ejercicios modificados prescritos por los expertos.
Relaciones sexuales: Es mejor abstenerse de mantener relaciones sexuales durante el tratamiento de FIV. Durante la fase de estimulación, se estimulan múltiples folículos para que ovulen a la vez. Por lo tanto, en caso de ovulación inesperada, las relaciones sexuales podrían dar lugar a embarazos múltiples. Además, el tratamiento provoca el aumento de tamaño de los ovarios y los vuelve quísticos. Las relaciones sexuales podrían provocar la rotura de un quiste o una torsión ovárica, empeorando la situación.
Fumar y beber: El tabaco y el alcohol siguen siendo un gran no durante todo el ciclo de FIV. Además, debes reducir el consumo de cafeína. Se ha informado de que el consumo de cafeína a niveles tan bajos como 50 mg al día tenía un impacto adverso en el éxito del procedimiento.
Después del ciclo
Después de la transferencia de embriones, no pienses que tu lista de cosas que hacer y no hacer en la FIV ha terminado. Todavía tienes muchas cosas de las que ocuparte.
Cosas que hacer
Cuídate bien: Sigue una dieta sana y bebe mucha agua. Descansa adecuadamente. Asegúrate de que duermes unas 7-8 horas al día. Para sentirte recargado, también puedes hacer siestas entre medias. No olvides tu salud mental. Comparta sus pensamientos, haga cosas que le gusten y medite para mantener la calma mientras su cuerpo intenta hacer frente a la situación.
Mantente alerta: si experimentas algún tipo de síntoma inusual, acude inmediatamente a tu médico. No hay que descuidar la hinchazón, la fiebre y las dificultades para orinar.
Cosas que no hay que hacer
Hacer ejercicio: Una vez implantado el embrión de la FIV, no hagas ningún ejercicio durante al menos 10 días. Para mantener el movimiento, basta con caminar durante unos minutos. Además, asegúrate de que tu región abdominal no esté sometida a ninguna tensión. Evita a toda costa agacharte, ya que eso podría provocar una torsión ovárica.
Relaciones sexuales: Evita tener relaciones sexuales durante al menos dos semanas después de la transferencia de embriones. El objetivo es permitir que el embrión se incruste en el revestimiento uterino. Para ello, se recomienda un reposo pélvico completo. Las relaciones sexuales hacen que el útero se contraiga. Eso podría impedir la implantación del embrión, lo que provocaría un fracaso de la FIV.
Uso de tampones: tras la transferencia de embriones, es normal que se produzcan manchados o sangrados leves. En estos casos, no utilices un tampón para evitar el riesgo de cualquier tipo de infección. En su lugar, utilice toallas sanitarias para la higiene.
Conclusión
Mantenerte sana siguiendo lo que debes y no debes hacer en la FIV y siguiendo las directrices de tu médico te ayudará mucho a conseguir el éxito en el procedimiento. Sin embargo, no pierda la esperanza si su primera prueba fracasa. La FIV suele requerir varias tomas. Tenga paciencia y esperanza y seguro que obtendrá los resultados.